jueves, 2 de febrero de 2012

Ella escribía siempre versos tristes; nunca pude comprenderla.

Y de repente te ahonda un pensamiento horrible. Llamémoslo ideal. Un ideal terrible que te ha hecho ver que estás desperdiciando tu vida a lo tonto y que nada tiene sentido. Hace que te alteres y que tu corazón lata más rápido de lo que debería. Te hace sentir depresiva, perdida, triste, pero sobre todo, incomprendida. ¿Qué ideal es? ¿Qué te hace sentir tan mal?
Estamos viviendo sin sentido. ¿Cuáles son tus metas en la vida? ¿Conseguir unos estudios? ¿Y luego qué? Ah, claro, un buen empleo. ¿Para qué quieres un buen empleo? ¿Quieres ganar mucho dinero? ¿Para qué? Oh, para comprarte muchas cosas. Pero..., ¿y luego qué? ¿Qué pasará cuando te mueras? ¿Has sido feliz? Estamos desperdiciando nuestras vidas en cosas innecesarias. "Necesitas unos estudios para sobrevivir ahí fuera". Mire usted, eso es lo que la sociedad ha conseguido que pensemos, pero podemos vivir perfectamente sin estudios y sin dinero. El rico morirá, igual que el pobre. ¿Y qué si tu nombre se recuerda? Ya habrás muerto y no podrás sentirte orgulloso de ti mismo.
Por eso deberíamos vivir como nos diese la gana, pero siendo felices. Porque no tiene ningún sentido estar triste si vas a acabar muriendo. Pero eso; es sencillamente imposible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario